Recorre la diversidad de paisajes burgaleses por la antigua vía del ferrocarril Santander-Mediterráneo

El Camino Natural Santander-Mediterráneo es un trayecto diseñado para peatones y ciclistas que aprovecha el trazado de la línea de ferrocarril del mismo nombre. El proyecto de unir el puerto de Santander con los valencianos de Sagunto y Valencia se inició en 1920 y pretendía aprovechar trazados existentes, como el que unía Calatayud y Sagunto o el Astillero-Ontaneda. Este último formaba parte del proyecto que pretendía unir por ferrocarril la capital cántabra con la burgalesa.

Entre 1927 y 1930 se construyó el tramo entre Cidad-Dosante y Calatayud. De esta manera, la provincia burgalesa se vio atravesada de sureste a noroeste por un camino de hierro. Para completar la unión con Santander faltaba atravesar la cordillera cantábrica. Para ello se proyectó el túnel de La Engaña, bajo los montes de Somo. Finalmente, en 1959 se culminó la perforación del paso, pero nunca llegó a utilizarse y, con el paso de los años, ha quedado inservible a causa de los derrumbes y la falta de mantenimiento.

Desde hace unos años, se ha venido trabajando para recuperar este trazado como camino natural. En 2024, en la provincia burgalesa pueden recorrerse ocho de las nueve etapas en las que se ha segmentado el trayecto entre el túnel de La Engaña y el límite provincial entre Burgos y Soria, situado a poco más de 4 kilómetros de Hontoria del Pinar. Sólo resta por adecuar y poner en servicio el tramo Cascajares de la Sierra-Hontoria del Pina. En total, cerca de 150 kilómetros en los que disfrutar contemplando los diferentes paisajes burgaleses.

Para conocer a fondo el camino y las etapas que lo conforman, se puede acudir a la web del Camino Natural Santander-Mediterráneo que ha puesto en marcha el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.