Valdenoceda o Valdenoceda de Valdivielso es un pueblo de encanto medieval y calles irregulares llenas de historia en el que destaca el conjunto integrado por la iglesia románica de San Miguel y la Torre de los Velasco.

Situado en el extremo occidental del Valle de Valdivielso, entre el puerto de la Mazorra y el desfiladero de Los Hocinos, Valdenoceda posee un caserío de trazas medievales diseminado en dos barrios.

La iglesia de San Miguel Arcángel, pese a haber perdido su cabecera original, conserva de su fábrica románica lo fundamental del cuerpo de la nave, la torre sobre el crucero y un ventanal en el costado sur. Al exterior destacan las ventanas geminadas de la torre, los relieves reutilizados en el husillo y la portada, cobijada por un elegante pórtico de cuatro arcos de medio punto. El elemento que reviste mayor curiosidad es el husillo que da acceso a la torre-campanario desde el pórtico de entrada, en cuyo exterior muestra dos altorrelieves que representan a San Juan y San Lucas.

Junto a la iglesia se alza, en una finca particular, la Torre de los Fernández de Velasco, construida a finales del siglo XIV y restaurada recientemente. Esta sólida fortificación, de veinte metros de altura y gruesos muros rematados por almenas, conserva saeteras y luce varios escudos de los Velasco. Es sin duda un testimonio del poder que la noble familia de los Velasco detentó en estas tierras.