Casa rural Casa Gustares
Casa rural Casa Gustares
En Vilviestre del Pinar (Burgos) a más de 1.140 m. de altitud, en un entorno inigualable (Sierra Burgalesa o Comarca Natural de Pinares Burgos – Soria) rodeado de montañas y naturaleza, enclave ideal para realizar diversas actividades, descansar, respirar aire puro y escapar del calor asfixiante de las ciudades. La posada antiguamente era una casona de carreteros del siglo XIX (1819) que había sido quemada por los franceses durante la guerra de la Independencia. Ahora ha sido reconstruida respetando la antigua distribución y aprovechando los materiales originales de la misma; dispone de 5 habitaciones, una de ellas abuhardillada para alojar tanto al viajero individual como a grupos de hasta 14 personas (para mas plazas pida información).
Cada habitación dispone de baño propio televisión y calefacción individual. Las zonas comunes disponen de televisión, sala de lectura y chimenea.
Si se desea, se puede disfrutar de la gastronomía típica del lugar (Ajo Carretero, Cocido Serrano, Asado de Lechazo Churro, o de la enorme variedad de setas que produce la tierra) bien en su comedor o en su patio privado.
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Más info
La planta baja muestra al visitante los aspectos más destacados de este territorio. La escultura conceptual de un quejigo preside el acceso y, es su sombra, quien muestra de un modo innovador y accesible la riqueza de este parque a través de múltiples recursos como recreaciones, dioramas y pantallas táctiles.
La planta superior pretende, de una manera más sensorial, iniciar al visitante en otros aspectos de este espacio natural. Montajes audiovisuales y modernas escenografías nos sumergen en un mar de sensaciones y emotivos tiempos pasados.
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Casa rural Casa Gustares
En Vilviestre del Pinar (Burgos) a más de 1.140 m. de altitud, en un entorno inigualable (Sierra Burgalesa o Comarca Natural de Pinares Burgos – Soria) rodeado de montañas y naturaleza, enclave ideal para realizar diversas actividades, descansar, respirar aire puro y escapar del calor asfixiante de las ciudades. La posada antiguamente era una casona de carreteros del siglo XIX (1819) que había sido quemada por los franceses durante la guerra de la Independencia. Ahora ha sido reconstruida respetando la antigua distribución y aprovechando los materiales originales de la misma; dispone de 5 habitaciones, una de ellas abuhardillada para alojar tanto al viajero individual como a grupos de hasta 14 personas (para mas plazas pida información).
Cada habitación dispone de baño propio televisión y calefacción individual. Las zonas comunes disponen de televisión, sala de lectura y chimenea.
Si se desea, se puede disfrutar de la gastronomía típica del lugar (Ajo Carretero, Cocido Serrano, Asado de Lechazo Churro, o de la enorme variedad de setas que produce la tierra) bien en su comedor o en su patio privado.
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La planta baja muestra al visitante los aspectos más destacados de este territorio. La escultura conceptual de un quejigo preside el acceso y, es su sombra, quien muestra de un modo innovador y accesible la riqueza de este parque a través de múltiples recursos como recreaciones, dioramas y pantallas táctiles.
La planta superior pretende, de una manera más sensorial, iniciar al visitante en otros aspectos de este espacio natural. Montajes audiovisuales y modernas escenografías nos sumergen en un mar de sensaciones y emotivos tiempos pasados.