Amanecer en verano con la ventana abierta y que te despierten los pájaros. Pocos lujos hay mayores, pero hay dos lugares en la provincia de Burgos donde en esto de los lujos hilan fino: Caleruega y Cilleruelo. El primero, un pequeño paraíso incluido en la Red Nacional de Pueblos Acogedores; naturaleza inmensa, patrimonio sorprendente y bodegas que elaboran un vino que te recordará que estás en tierra de la Ribera del Duero. El segundo, un pueblo discreto perdido en la comarca de Arlanza, flanqueado por la Sierra de la Demanda y la hermosura sempiterna del verano burgalés. Aquí, en medio de la belleza más silenciosa, puedes despertar con el olor del descanso, el que emanan los campos de lavanda al amanecer, impregnándolo todo de ese suave olor a limpio. La slowlife aquí adquiere otro nivel.

Solo imaginarse unos días de verano en estos dos rincones burgaleses es como estar ya de vacaciones. Porque campos de lavanda hay muchos, pero sin masificar, pocos. Y sin masificar, rodeados de bodegas y con un patrimonio sorprendente, solo Caleruega y Cilleruelo.

Si quieres pasear entre lavandas y darte un baño de relax en estos infinitos mares violetas, el espectáculo de la floración te espera desde finales de junio a principios de agosto. Si te coincide con el 13 y 14 de julio, podrás además disfrutar del Lavanda Fest, un festival que se estrena en Caleruega, aprovechando el irresistible reclamo del nacimiento de la flor de la lavanda. Si te viene mejor el 3 y 4 de agosto, la Fiesta de la Cosecha de la Lavanda es tu cita en Cilleruelo. Suena bien, ¿no? La mejor escapada de tu slowsummer te espera en la provincia de Burgos.

Caleruega: bodegas romanas, gótico y Barroco en uno de ‘Los pueblos más bonitos de España’

Recorrer en verano las rutas que atraviesan este pueblo burgalés, ya sea en bicicleta, a pie o en coche, resulta irresistible. Y es que más allá de la indudable belleza del campo perfectamente cepillado de lavanda que rodea este lugar, Caleruega es un destinazo. Uno de Los pueblos más bonitos de España por muchos motivos, y no sólo estéticos.

Cuna de Santo Domingo de Guzmán, padre en el siglo XII de la Orden de los Dominicos y motivo de que este pueblo que no llega a los 400 vecinos aparezca en la ‘Divina Comedia’ de Dante Alighieri, Caleruega es un sueño para los amantes del patrimonio inesperado y la Historia sorprendente. Y es por algo aparecen en el Paraíso de una de las obras cumbres de la Literatura Universal. Desde la iglesia románica de San Sebastián, donde se bautizó a Domingo de Guzmán y cuya pila bautismal, sita ahora en el Monasterio de las MM Dominicas de Santo Domingo el Real (Madrid), es en la que se bautiza a los miembros de la Casa Real Española, al Real Monasterio de Santo Domingo de Guzmán, donde se encuentra El Pocito, su lugar exacto de nacimiento, junto a un claustro del románico tardío y expresiones góticas de altísimo valor. Todo escoltado por una portada barroca de majestuosa belleza.

El Torreón de los Guzmán es otro de los puntos que se roba las miradas de los viajeros que llegan hasta aquí atraídos por la Historia y las huellas que ésta dejó en el municipio. Torre de vigilancia y defensa en tiempos de Reconquista, subirse sobre sus robustos muros del siglo XII, anexos al Convento de Santo Domingo, regala una espectacular vista del mar de lavanda que perfuma Caleruega.

Los amantes del enoturismo, por su parte, encuentran en este pueblo plagado de viñedos en lo alto de la Ribera del Duero, buen vino y buenas bodegas, muchas de ellas con su encanto tradicional casi virgen. La preferida de muchos, una cueva-bodega horadada en la roca por los romanos. El mayor tesoro que queda en el despoblado San Martín de Bañuelos.

Música, folclore, magia, humor y artesanía con los campos de lavanda de telón de fondo

Pero si la lavanda y su instagrameable belleza es lo que te trae hasta Caleruega, entonces el Lavanda Fest es tu fecha en el calendario. El 13 y 14 de julio la música, la cultura y la naturaleza se dan cita en este rincón de la Ribera del Duero entre paisajes teñidos de malva intenso. Soleá Morente y Siloé serán los cabezas de cartel sobre un escenario en el que también sonarán artistas emergentes como UnderWallace, Arroz Catalina y Jean Pierre. Un mercado de artesanía completará la oferta con la magia y el humor de la Cía Kicirke para los más pequeños, mientras que la música y el baile tradicional correrá a cargo de Tierras de Arauzo. Un sinfín de actividades gratuitas que tendrán lugar en el hermoso casco histórico de Caleruega, donde también habrá varios foodtrucks que ofrecerán a los asistentes platos que irán desde la gastronomía más tradicional a la más vanguardista.

La inmersión en los campos de lavanda será programada con los asistentes, que podrán navegar por este inmenso océano perfumado para ver de cerca la floración, así como asistir a sesiones de fotografía especializadas para aprender a sacar el máximo partido con la cámara a la belleza de este mágico momento. Los fotones están más que garantizados.

Cilleruelo: tu centro de estética natural. Un lujazo para los seguidores del skincare y el yoga

En los campos de Cilleruelo se respira calma. Podría decirse que el slowlife nació aquí. Y es que en este pedacito de la comarca de Arlanza los campos de lavanda no dejan de florecer. Cilleruelo desprende una fragancia espectacular en verano, así que venir a este lugar del partido de Lerma en esta época es, sin duda, una buena idea.

Pero en Cilleruelo de Arriba no solo se respira lavanda, también Historia y Arte. El estilo gótico de la portada de la Iglesia de Santa María de la Torre (XVII y XVIII) y la talla de su Cristo Crucificado son dos buenas excusas para venir, así como la tradicional fiesta de San Quirico y Santa Julita, que se celebra el 16 de junio con una amplia agenda festiva llena de actividades deportivas, musicales y religiosas, en honor a los patrones del municipio. La antesala perfecta a la floración.

Y es que en Cilleruelo se celebra a la lavanda desde que sale la primera flor, por eso desde el 20 de junio al 30 de agosto, Aire de Arlanza organiza un montón de planazos con la lavanda como protagonista y escenario. Desde sesiones de yoga entre lavandas (27 de julio y 3, 10 y 17 de agosto) a un taller de fotografía infantil (20 y 27 de julio) o simplemente un paseo para perderse entre las infinitas hileras de flores y respirar el perfume de la tranquilidad.

La cita importante llega, por primera vez este año, el 3 y 4 de agosto con la Fiesta de la Cosecha de la Lavanda. Un fin de semana en el que los yoguis podrán comenzar con el mejor plan mañanero, para después asistir a un taller floral, una cata de cervezas entre lavandas o, ya por la tarde, una visita al lagar del pueblo para terminar con una cata de vinos, organizada en colaboración con la Ruta del Vino del Arlanza, que culminará con un concierto al atardecer entre lavandas. Además, la destilería del pueblo Aromáticas Cynol ofrecerá jornadas de puertas abiertas; una oportunidad para conocer de cerca el proceso de extracción de los aceites de la lavanda con los que luego se elaboran desde ginebras y licores, a productos de alta cosmética natural entre los que hay aceites, aguas florales, hidratantes, perfumes, jabones… Un lujazo para los fieles al skincare, pues podrán adquirir todos los productos en la tienda Aire de Arlanza que estará abierta en Cilleruelo durante toda la floración. Reducir el estrés y la ansiedad nunca resultó tan bonito ni tan fácil.

*Para todas las actividades se requiere previa reserva en el 609 92 33 63