El río Molinar, al noreste de la provincia, ha creado una serie de saltos de agua que tradicionalmente han sido aprovechados para diversos usos. Es el mismo río el que divide al pueblo de Tobera en dos barrios, formando innumerables cascadas. El recorrido está muy bien indicado, es circular y se puede realizar por el trayecto corto, unos 25 minutos o el largo, de unos 40.

Al lado del puentecillo nos encontramos con unas escaleras de piedra, en el margen derecho “aguas arriba”, desde donde comenzamos la ruta, que nos va llevando por los saltos hasta llegar a uno de mayor altura. Estas caídas de agua han originado un paraje que el río ha ido cincelando en la roca, formando un bello escenario.

¿CÓMO LLEGAR?

En el Valle de Tobalina, partiendo de Frías por la BU-520 y a unos 2 kilómetros, llegamos a Tobera. También se puede llegar desde el sur desviándote en la N-232 a la altura de Busto de Bureba, por la BU-504. A unos 500 metros de la entrada y muy bien señalizado, hallamos un camino a la derecha que nos indica el comienzo de la ruta.